Vans in the City es un estudio desarrollado por Ford Pro en colaboración con Reuters, con el objetivo de mostrar las tendencias actuales en el sector de los vehículos comerciales y las ciudades en las que operan.
Este trabajo de investigación pretende poner de relieve el impacto que tiene el modo en que las empresas y las flotas transportan mercancías, junto con la forma en que los consumidores compran productos; una situación que está creando nuevos retos y brindando oportunidades para redefinir la ciudad del mañana.
El informe Vans in the City consiste en una investigación cuantitativa y cualitativa que reúne voces de diversos sectores, desde el reparto de última milla a la tecnología o autoridades municipales -como FedEx, DPD, Eurocities, la ciudad de Valencia o Vodafone- e incorpora estadísticas procedentes de una encuesta financiada por Ford a escala europea.
La encuesta recoge las respuestas de empresas, minoristas y flotas de todo el continente para conocer los puntos débiles a los que se enfrentan y también las áreas a las que dan prioridad como empresas de cara al futuro, ya sea la electrificación, la conectividad o cómo afrontar el aumento de la demanda.
Capítulos clave del informe Vans in the City:
- La demanda urbana sigue creciendo, pero ¿podemos seguirle el ritmo?
- Lograr un transporte urbano de cero emisiones.
- La conectividad, clave para reducir la complejidad y la congestión.
- El liderazgo urbano debe dar un paso adelante.
- Una ciudad del futuro más limpia e inteligente.
- Vehículos comerciales en la ciudad: perspectivas y mensajes clave.
Vans in the City, en datos
Situación actual:
- Las entregas urbanas han aumentado más de un 50% en los dos últimos años, según muchos encuestados.
- En todo el mundo, el 14% de las compras en línea se devuelven; en Europa, el porcentaje es inferior (7%).
- El 72,2% de las empresas considera que las devoluciones de ventas por Internet son una carga importante para sus operaciones.
- Se estima que entre 2010 y 2019 se ha producido un aumento del 20-35% en la congestión de las ciudades, y más de la mitad -el 53%- de las empresas señalan la congestión como el problema principal para la logística urbana.
- Las principales consecuencias del crecimiento de la demanda del reparto de última milla son:
- Aumento del coste por entrega.
- Mayor necesidad de invertir en tecnologías de apoyo.
- Necesidad de una mejora de la reputación.
- Los consumidores urbanos europeos que compran habitualmente por Internet declaran que realizan más pedidos en casi todas las categorías que sus homólogos rurales.
Riesgos:
- En 2050, dos tercios de la población mundial vivirán en zonas urbanas, según la ONU.
- Si se mantiene el crecimiento logístico actual y no se toman medidas para mitigarlo, solo en el Reino Unido, los vehículos comerciales ligeros recorrerán 1.000 millones de km más.
- Según la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA), el número de vehículos comerciales por cada 1.000 habitantes en Europa (incluidos Rusia, Turquía, Reino Unido, la UE y la AELC) pasará de 69 en 2015 a 76 en 2022. En ese plazo, el parque de vehículos industriales ligeros ha crecido un 14,3%.
- La demanda (en el caso del Reino Unido) también supondría una previsión de 56.000 furgonetas más en las ciudades, lo que representaría un crecimiento del 7,7% en la flota de furgonetas de reparto del país y añadiría 17 millones de recorridos de reparto más al año.
- El parque de vehículos de reparto urbano podría crecer en casi 2 millones de unidades entre 2020 y 2026.
- Consecuencias medioambientales: la necesidad de recoger mercancías después de una entrega tiene un elevado coste en términos de emisiones de carbono, ya que hace que las emisiones del recorrido inicial hayan sido inútiles; a esto se une el hecho de que los recorridos para recoger devoluciones a menudo fracasan, lo que requiere aún más desplazamientos. Las implicaciones de esta situación son aún más significativas, ya que una proporción considerable de los bienes devueltos no son aptos para la recompra, lo que provoca que cantidades masivas de productos vayan a parar a los vertederos.
- En Europa, es necesario instalar hasta 14.000 puntos de recarga públicos a la semana entre 2021 y 2030 para alcanzar los 6,8 millones precisos para cumplir los objetivos climáticos establecidos.
Acción de los clientes:
- Nueve de cada diez empresas le confieren valor a los vehículos conectados: el 47% ya utiliza la conectividad de los mismos.
- El 53% de las empresas espera comprar furgonetas eléctricas en los próximos dos años; un porcentaje mayor del que tiene la intención de compra de vehículos de combustión interna (40%).
- Los operadores están muy a favor de las bicicletas eléctricas, con un 20% que planea adquirir bicicletas eléctricas y un 8,6% de motocicletas electrificadas, frente a solo un 5,7% que contempla los motores convencionales.
- El 64% de las empresas espera reducir los costes operativos como resultado de la electrificación de sus flotas.
- El coste de las baterías sigue siendo un escollo para la industria automovilística, por lo que el 63,9% también espera que aumente el coste de adquisición de vehículos.
Pruebas innovadoras:
- Resultados de Billingsgate: reducción del 37% de las emisiones de CO2 y casi 24.000 km menos (los comerciantes utilizaron siete E-Transit refrigeradas).
- La prueba del centro móvil de paquetería de Ford Pro (una furgoneta que actúa como nodo central de reparto para un equipo de mensajeros más urbanos, como porteros ambulantes o mensajeros en bicicleta, en rutas de reparto localizadas) dio como resultado un 75% menos de kilómetros para el mismo volumen de reparto.
- La importancia de las ciudades inteligentes (“smart cities”): el caso de Valencia.
La micromovilidad importa: